1parte Una Mirada a la Region desde los Mototrabajadores
LOS
MOTOTRABAJADORES Y LA REGIÓN.
Como
organización sindical presentamos una lectura de la realidad de nuestros
departamentos; la región sur occidente nos presenta la paradoja de un país
inmensamente rico en posibilidades, grandes riquezas naturales, con una
situación geográfica privilegiada que ha recibido de los recursos de su
subsuelo una fabulosa renta a través de la cual ha generado progresos
innegables a favor de la intervención de muchas multinacionales extranjeras, pero acumulando en el tiempo un
empobrecimiento alarmante y una clara conclusión histórica: las organizaciones
sociales y políticas en estos departamentos no hemos sido capaces de expresar a
plenitud nuestro gran potencial material y humano de manera de poder
considerarnos como apuesta de país en forma verdaderamente revolucionaria
integral y sustentable.
En
la dinámica de esta paradoja del gran potencial irrealizado y de las
consecuentes realidades de pobreza, privilegios, improductividad, injusticia e
inequidad, tiene influencia vital el
hecho de que los colombianos sigamos arrastrando un conjunto de fallas y
contradicciones estructurales con un gran contenido y sentido histórico que
como nación no hemos analizado, ni
comprendido a plenitud y significan un grave peligro para la consecución y
conquista de cambios estructurales por
el país que queremos.
Los
colombianos hemos permitido que nuestra desarrollo como país haya sido
secularmente condicionada por elementos como el caudillismo, el mesianismo, la
hipercentralización política y administrativa, la indiferencia, el facilismo, y
el deseo de riqueza fácil en vez de los resultados acumulados en el
tiempo, todo lo cual genera un tejido de
aspectos estructurales y coyunturales, políticos, económicos, sociales y
culturales y de estructura psicológica y personalidad que no nos permiten
generar un proceso sostenido en el tiempo de reformas y transformaciones. Esta
dinámica señalada que
genera esa situación
continúa de improductividad,
inequidad e injusticia de no recibir una respuesta determinante de cambio, continuara
arrastrándonos a graves desequilibrios políticos y sociales que significan
un serio retroceso histórico.
Ante
esta convicción y esta realidad colombiana del potencial irrealizado, de un
conjunto de contradicciones históricas no resueltas, en nuestro desarrollo como
país y nuestra gran vocación de cambio en libertad, abrimos las puertas del
dialogo para ser con otros, muy convencidos de que con urgencia debemos
analizar y conocer nuestros procesos históricos nacionales y regionales para
obtener un mayor grado de madurez como país,
que nos permita elaborar y llevar a la práctica con coherencia y visión
compartida un gran plan estratégico nacional y regional de desarrollo integral
y plenitud democrática.
Sustentados
en nuestra democracia popular y el maravilloso capital humano que acompaña el
congreso de los pueblos e infinitos recursos materiales nacionales y regionales
tenemos la obligación moral con nosotros mismos y nuestros descendientes de una
vez por todas, impedir el que
continuemos desperdiciando talento, riqueza y oportunidades, generando a través
de la participación responsable y solidaria desde lo local a lo nacional, la
fuerza histórica de aceptar al otro con la creatividad, justicia, eficiencia y
que definitivamente nos transforme en un movimiento sociopolítico e integralmente.
El
congreso de los pueblos como escenario de articulación social y político
requiere de un plan estratégico integral político, económico y social, educativo
y cultural que permita en los próximos
cinco años, identificar desde la autocritica las formas de orientar y
dirigir los mandatos( TTS, Paz, Mujer,
Jóvenes, Urbano etc.,) encaminándolos a consolidarse desde la base social, que
trasforme las luchas del país en verdadero sujeto social y político, autónomo, sustentable
y con propuesta revolucionaria en la educación y la cultura, que elimine para
siempre el sentido mesiánico-clientelar que es tan significativo desde la
organización no gubernamental, hasta la mente de los colombianos y lo sustituya
por una verdadera vocación de ser productivos y acumulativos en el tiempo con
plena conciencia de responsabilidad y solidaridad, educados y preparados desde
la base e inclusive que nos permitan participar con productividad y eficiencia
en el escenario local, regional y nacional e internacional. Pero enfatizamos el
hecho de que todos estos elementos de una visión estratégica del país jamás
serán alcanzados sino existe la clara voluntad política de actuar y sustituir un
proceso social basado en privilegios del modelo dominante. No hacerlo sería
condenar este país y su inmenso potencial humano y material a la crisis
generalizada del movimiento social, acompañado de la inestabilidad y violencia
como características permanentes de existencia.
Fortalecer
el tejido esencial desde adentro, es prioritario; pero complementado con el relacionamiento
hacia afuera, para conformar en términos prácticos el concepto de sociedad
civil básico en la construcción legislativa y popular, practicando la vida
democrática y que el permanente debate se revierta a la comunidad y al
individuo en solidaridad, justicia, equidad e igualdad de oportunidades y no en
privilegios burocráticos y autoritarismo. Solo así encontraremos una dinámica
existencial, vital en el desarrollo histórico nacional y regional, que retome el
concepto popular de región como estado, en economía y en sociedad.
- Habría que pensarnos desde la organización popular que la región
amerita urgentemente una reflexión autocritica, en cuanto a descentralizar la
conducción colectiva, que rescate, evalúe, reoriente la práctica de autonomía y
el concepto de integración nacional.
- Redefinición del concepto de interrelación y participación de
los sectores políticos, económicos, sociales y culturales.
- Cambio de comportamiento que influyan en la formación, educación,
capacitación, comunicación y la cultura.
- Tener en cuenta el territorio y el medio ambiente en el marco de un proyecto
estratégico de país y región.
SUBDIRECTIVA SUNMCOL BOLIVAR
MOTOTRABAJADORES DEL MAGDALENA MEDIO
Comentarios
Publicar un comentario